Nada es lo mismo que antes en las empresas actuales. Ahora más que nunca, directivos y empleados trabajan codo con codo y toman decisiones conjuntas para contribuir el éxito de la compañía. Procesos en los que el coaching ha cobrado un protagonismo sin precedentes. Es por eso que la figura del coach en la empresa se ha normalizado hasta tal punto que ya no llega a sorprender. Pero un coach debe ir más allá de asistir a otras personas para que alcancen su máximo potencial y desempeño.
Siguiendo al experto en coaching Gregory Cajina, compartimos contigo 4 pilares fundamentales en los que el coaching debe apoyarse si realmente quieres obtener resultados extraordinarios. Son los siguientes:
1. El propósito. Aclara los objetivos a tus empleados, dales motivación y metas importantes que conseguir. Es importante saber y recordar día a día el para qué, no por qué estás haciendo lo que haces. Y es que cuando el colaborador tiene pistas sobre el objetivo de su tarea, éste trabajará con más empeño y motivación en ella.
2. El conocimiento. Identifica las competencias, aptitudes, conocimientos, ideas, técnicas, metodologías y herramientas que son necesarios para alcanzar el objetivo. El propósito sin el conocimiento es como un pájaro sin alas: no puede avanzar.
“Una buena decisión se basa en el conocimiento y no en números.”
Platón
3. El trabajo en equipo. En este caso se trata de una identificación de las redes, relaciones, colegas, clientes, amigos, proveedores, etc., que pueden ayudar al empresario a alcanzar sus objetivos. La colaboración y el trabajo en equipo trae un éxito compartido y esto nos hace sentir que trabajamos no sólo CON sino PARA otros. El trabajo en equipo y compartir el éxito nos mantiene despiertos.
“Solos podemos hacer muy poco, juntos podemos hacer mucho más.”
Helen Keller
4. La acción. El último pilar tiene en cuenta el rendimiento, las acciones presentes, la toma de decisiones y la solución de problemas. Sin embargo, para realizar una acción correcta necesitas tener en cuenta los otros tres pilares. Tienes que saber cuál es el propósito, también necesitas tener los conocimientos y, desde luego, trabajar con el equipo para lograr mejores resultados.
La puesta en práctica de estos cuatro principios podemos resumirla en el siguiente caso: imagina que estás de viaje y que tienes un destino (propósito), pero de repente te pierdes, entonces puedes utilizar tu conocimiento previo o preguntar a otras personas (trabajo en equipo) para que te expliquen cómo llegar a tu destino (acción). En definitiva, todo responde a una regla muy sencilla: cuando conoces el objetivo, encontrarás la manera de lograrlo.
Fuente: “Coaching para emprender. Cambia tu rumbo. Despide a tu jefe.” Gregory Cajina.
Imagen principal: connecthubcloud.com
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